Desde el pasado 28 de abril y hasta el próximo 11 de junio se representa Refugio en el teatro María Guerrero. Con texto y dirección de Miguel del Arco el Centro Dramático Nacional aborda un tema de actualidad como es la emigración.
Al igual que en Teorema de Pasolini la presencia de un extraño en el día a día de una familia desestabiliza la vida de sus miembros. En este caso, la obra empieza cuando ésta acoge a un refugiado árabe en estado de shock porque las aguas del mar Mediterráneo se han tragado a su mujer e hijos.
Miguel Del Arco crea un puñado de arquetipos para formar una familia que está interpretada por los actores Israel Elejalde, Raúl Prieto, Beatriz Argüello, Carmen Arévalo, Macarena Sanz, María Morales y Hugo de la Vega. Éstos son: un político cuyo discurso hace tiempo que retorció las ideas para defender el poder, una cantante de ópera que perdió la voz y con ella su medio de expresión más íntimo, una mujer que defendió la libertad en el pasado y ahora no encuentra verbos para conjugar el futuro, una joven airada porque cree que intentan acallar su voz y un chaval que pretende confinarse entre las expresiones start game y game over.
Mientras tanto el refugiado árabe recién acogido no habla. Vive paralizado después de haber asistido al drama de la pérdida de su propia familia. Su silencio solo quiere evocar la ausencia de los suyos pero su callada presencia desata las palabras de quienes le rodean. La familia se arma así de palabras para desentrañar el silencio de quien no quiere hablar. Aunque quizás solo quieran encontrar su propio refugio.
En definitiva, Refugio es una obra que invita a la reflexión a través del lenguaje y por la ausencia del mismo.
