Han pasado 20 años desde que se suicidó Adela. Falleció la enfermiza Angustias, que muere sin hijos y deja su herencia a su hermana Martirio. Bernarda murió no sabemos si de bilis o de odio. Falleció Poncia, pero su sobrina, del mismo nombre sigue limpiando los suelos de una casa que perdió su condición solariega. Magdalena y Amelia siguen ahí en su cuarto de estar recibiendo la visita de Martirio. Ahora dentro de la casa han alquilado una habitación a un joven maestro y Pepe el Romano casado con Martirio, sigue montando a caballo galopando por el pueblo y rondando otras casas…

Y Pepe, con los años, ha intensificado su vocación por el alcohol y por el juego…